A la sombra de las glicinias y el tintineo de las campanitas colgantes, comenzamos con un estupendo aperitivo a base de las bien aliñadas aceitunas que Ángela había recogido de nuestro olivar, para pasar a degustar unas ricas migas acompañadas de variados complementos en un agradable ambiente. Terminamos con los postres homenajeando al cumpleañero con la tarta de felicitación, y entonando el cumpleaños feliz.
Pero como no todo es gozo en la vida del cohousing, nos reunimos después para trabajar en una larga y densa Asamblea con el fin de tratar numerosos asuntos importantes , hasta que anocheció. Conseguimos avanzar mucho e incluso acabar eligiendo el modelo de apartamento para nuestro proyecto entre los diferentes que el equipo de arquitectura nos había presentado.
¡Seguimos dando grandes pasos hacia nuestro futuro proyecto en Olivar Plaza!
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